Mientras la investigación entra en una búsqueda frenética de la niña desaparecida, la detective Warren ha de compartir caso con su antiguo novio, Bobby Dodge, para conseguir desentrañar los entresijos del cuerpo de policía estatal de Boston y de paso desenterrar algunos secretos familiares. ¿De verdad dispararía una agente bien entrenada a su propio marido? ¿Haría daño una madre a su propia hija?
Pero para Tessa Leoni lo peor no ha llegado aún. Sin vuelta atrás. Sin nadie en quien confiar. Tiene un único objetivo y usará toda su energía y sus conocimientos para hacer lo que ha de hacer. Ningún sacrificio es demasiado grande, nada es inconcebible. Una madre sabe a quién ama. Y todos los demás van a pagar.
Reseña
La narración, está escrita en un lenguaje sencillo, claro, dinámico y preciso, con un amplio contenido en diálogos que amenizan la lectura de los capítulos, que son en su mayor parte breves.
Como curiosidad, podemos destacar que los capítulos pares están narrados en tercera persona y se centran en los personajes no protagonistas, en cambio los capítulos impares están escritos en primera persona, y que, alternándose, son narrados entre las dos protagonistas femeninas, que conducen la narración desde el principio de manera trepidante.
Los personajes centrales tienen unas características especiales, las dos son mujeres en un ámbito no muy común, ambas policías, aunque en distintos cuerpos de seguridad, una de ellas perteneciente a la policía estatal, mientras que la otra es inspectora en la policía.
Claramente la autora, centra la narración en las particularidades personales de ambas, polarizando dos extremos. En uno lo que se puede llegar a hacer por una hija, en tanto que el otro extremo nos encontramos a la otra protagonista con la duda de si sería capaz de compatibilizar la maternidad con su trabajo.
Es curioso destacar que desde el principio, existe cierta tensión entre las protagonistas, un afán de caza al criminal, o al crimen.
Todos los hombres en la trama, son secundarios, no se desarrollan sus perfiles, sin embargo, sin ellos gran parte de la intriga no existiría. Son ellos, con sus actitudes, los que cambian nuestro punto de ver la intriga, cada poco, nuestra visión de los hechos, es lentamente manipulada, y cambiamos la idea de qué, cómo, y por qué se realiza el delito.
Es difícil asignar un género determinado, esta novela no es un thriller al uso, se mantiene cierta tensión mediante la no resolución hasta el final del misterio de dónde está la hija de seis años, (¿secuestrada?,¿muerta?), sin embargo, la trama no desarrolla ese hilo conductor, se centra en las dificultades de compaginar trabajo, familia y relaciones personales en una profesión que conlleva un alto grado de dedicación, y en consecuencia, de estrés personal.
Es una lectura muy recomendable, por lo amena y el equilibrio entre intriga y realidad.
Si yo fuera este libro, me gustaría, ser tan previsor como la protagonista.
Parece entretenida, aunque con estas novelas últimamente me pasa que parece que hay tantas que luego al final no me acabo metiendo con ninguna de ellas :-)
ResponderEliminarBesos.